Café: aliado inesperado del hígado
Más allá de mantenerte despierto, el café tiene propiedades protectoras para tu salud hepática.
Durante años, el café fue señalado como un hábito poco saludable. Pero nuevas investigaciones han revelado que su consumo moderado (entre 2 y 4 tazas diarias) puede ser altamente beneficioso para el hígado. Estudios del British Liver Trust y universidades como Harvard señalan que el café reduce el riesgo de fibrosis, cirrosis y ciertos tipos de cáncer hepático.
El café estimula enzimas que ayudan a eliminar toxinas, tiene efectos antiinflamatorios y mejora la sensibilidad a la insulina. Incluso quienes ya presentan enfermedades hepáticas pueden beneficiarse de su consumo, siempre bajo supervisión médica.
Eso sí: el beneficio se asocia más al café negro, sin azúcar ni cremas. Como con todo, la clave está en el equilibrio. Un buen café puede ser más que una pausa: puede ser un escudo.